Si quieres adquirir una vivienda propia sin complicaciones ni intermediarios, una buena opción es comprar un piso a un banco. Estos inmuebles suelen tener precios más bajos y condiciones más favorables que los que se encuentran en el mercado inmobiliario o los que se venden de forma particular. Para facilitar el proceso y ahorrar tiempo y dinero, lo más recomendable es contar con la ayuda de un
bróker hipotecario
, que se encargará de gestionar todo lo relacionado con la compra del piso, así como de buscar la mejor financiación posible.