No es solo realizar una campaña de email marketing y dejarla en el olvido, hay que planificar y controlar las métricas o indicadores de claves de rendimiento (KPI) más importantes para saber si la
estrategia de email marketing
que se ha planificado es la correcta o si hay que hacer ajustes para que funcione a cabalidad. Estas métricas a las que hay que hacer seguimiento son: la tasa de apertura de correos que indica cuantos suscriptores abrieron los correos, la tasa de clics que muestra el porcentaje de cuantos hicieron clic en algún enlace; la tasa de conversión que es el porcentaje de personas que realizaron una acción deseada al enviar el mail y el número de bajas que indica cuantos suscriptores salen de las listas.