Hoy en día disponemos de gran cantidad de comodidades a nuestro alcance, que hacen que en nuestra vida cotidiana sea más llevadero desde el aspecto más esencial hasta el más trivial. Está claro que los adelantos tecnológicos nos ahorran horas y horas al realizar ciertas labores o trámites. Sin embargo, hay cosas para las que es mejor tomarse el tiempo necesario. Sobre todo aquellas que requieren de un tiempo y un método adecuados para que los resultados sobresalgan por encima del resto.
Uno de los mejores ejemplos que podría describir estos casos es el horno de leña. Por muchos adelantos tecnológicos y muchos ceros que contenga su precio, los asados en un horno moderno no alcanzan el mismo resultado que en un horno de leña tradicional. Y lo mismo podríamos decir de las pizzas, los pescados, las ensaladas o los guisos. El toque que le aporta la leña a los alimentos se puede además variar dependiendo de la modalidad de árbol al que pertenezca. De esta manera, nos encontramos con maderas de encina, roble, sarmiento, olivo o carrasca, entre otras.
En mi caso pude adquirir unos
hornos de leña pereruela
y de verdad son muy excelentes, si quieren conocer mas pueden visitar la web semanalnews.com/noticia/los-mejores-hornos-de-lena-artesanales/